Nunca había sido tan crucial para una empresa preocuparse por la sostenibilidad como lo es hoy en día. Según el estudio ´GlobalWebindex´ sobre las tendencias de consumo de 2020, seis de cada diez millennials estarían dispuestos a pagar un precio mayor por un productos ecológico y sostenible, seguidos por un 58% de los miembros de la Generación Z, un 55% de la Generación X, y casi la mitad (46%) de los Baby Boomers.
En los últimos años, además, estas cifras no han hecho más que crecer. Cada vez son más los consumidores que exigen a las empresas que comercialicen productos y servicios que sean respetuosos con el medio ambiente.
Pero la tendencia no se acaba solo en los clientes, sino que, por otro lado, los equipos también demandan cada vez más que sus compañías sean éticas y sostenibles. Incluso los inversores se están apuntando a esta tendencia, invirtiendo en negocios que siguen principios de gestión y funcionamiento que respetan a la naturaleza. Nuevas formas de trabajar que, además, pueden llegar a ahorrarles dinero.
Si tu empresa todavía no está en ese punto, ¿cómo llevar a cabo el cambio necesario? A continuación detallaremos algunas estrategias para conseguir que una compañía sea más sostenible.
Tabla de contenidos
- 1. Introduce la sostenibilidad en la misión de tu empresa
- 2. Crea un producto o servicio que sea sostenible
- 3. Siempre que sea posible, elige la opción más sostenible
- 4. Haz tus instalaciones sostenibles y eficientes energéticamente
- 5. Participa o promueve acciones de sostenibilidad
- 6. Fomenta el trabajo en remoto
- 7. Escoge suministros sostenibles
- 8. Promueve el reciclaje, la reutilización y la reducción de residuos
- 9. Implica a tus empleados en los esfuerzos de sostenibilidad
- 10. Obtén certificaciones de sostenibilidad
1. Introduce la sostenibilidad en la misión de tu empresa
Tanto si tu negocio es nuevo como si ya llevas muchos años en el mercado, resulta un buen punto de partida incorporar en la misión de la empresa una referencia a la sostenibilidad e incluso algo un poco más detallado en relación a tus objetivos de sostenibilidad.
Este cambio en los valores clave de tu compañía pueden parecer baladí, pero ayudará a que tu equipo se organice y centre sus esfuerzos en que todas las actividades de la empresa giren alrededor de la sostenibilidad. Para los maganers esta tarea significa traducir esa declaración de intenciones en objetivos y prioridades de los diferentes departamentos.
En el caso de que te plantees obtener un certificado de empresa sostenible (hablaremos sobre esto más adelante), será necesario que la sostenibilidad esté en la misión de tu empresa.
2. Crea un producto o servicio que sea sostenible
Una vez que la sostenibilidad forma parte de los principios básicos de tu empresa, quizá es el momento de crear o lanzar un producto o servicio que respete esta misión. Para hacerlo, procura buscar proveedores sostenibles, refinar tu proceso de producción para que sea lo más respetuoso posible con el medio ambiente y distribúyelo de forma sostenible.
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3. Siempre que sea posible, elige la opción más sostenible
Analiza todas tus operaciones para detectar todas las oportunidades de optimizar la sostenibilidad de tu actividad. Por ejemplo, si estás al frente de una compañía de construcción, podrías empezar reduciendo el consumo de agua, empleando vehículos y máquinas con bajas emisiones de CO2, implementando una gestión de residuos adecuada que te permita reducir la contaminación y reutilizar recursos, etc.
4. Haz tus instalaciones sostenibles y eficientes energéticamente
Muchas compañías trabajan mucho para hacer que sus productos o sus servicios se vean muy sostenibles de cara al consumidor final, pero como los clientes no suelen tener mucho acceso a tus almacenes u oficinas, no parece tan importante mantener allí un grado elevado de sostenibilidad.
Pero todos los principios que aplicamos a los productos y servicios, deberían aplicarse también para nuestras instalaciones, que deberían ser eficientes energéticamente (mediante el uso de equipos de bajo consumo) y ser generadoras del mínimo de residuos. La formación a los empleados sobre qué es sostenible y qué no siempre es positiva también en este ámbito.
5. Participa o promueve acciones de sostenibilidad
Los actos de donación o de apoyo a causas sostenibles deberían ser una pieza crucial en nuestra estrategia de sostenibilidad. Enviar a ONGs materiales que de otro modo irían a un vertedero, incluídos productos terminados, es una buena forma de apoyar a la sociedad y reducir residuos.
También es positivo asociarse a organizaciones que promuevan la lucha contra el cambio climático u ofrecer a los empleados facilidades para realizar actividades de voluntariado.
6. Fomenta el trabajo en remoto
Hace unos años, el teletrabajo parecía un sueño inalcanzable. Luego llegó la pandemia y el panorama se aceleró a toda velocidad, hubo que implementarlo de la noche a la mañana y eso provocó muchos problemas pero también muchas oportunidades. También favoreció la sostenibilidad.
Por lo tanto, aunque para muchas empresas el teletrabajo resulta todavía imposible, casi todas pueden optar por un modelo de teletrabajo parcial o híbrido. El teletrabajo reduce el consumo de energía en las oficinas debido a la reducción en los costes de iluminación, climatización y por tener menos aparatos conectados a la red eléctrica. Se produce además una drástica reducción de los desplazamientos y, por tanto, el consumo de combustibles.
Por otro lado, el teletrabajo puede facilitar la puesta en marcha de otras iniciativas en la empresa como la reducción del uso de papel, de cápsulas desechables en las máquinas de café, de vasos de plástico o papel, etc.
7. Escoge suministros sostenibles
Aunque una empresa apueste por la reducción del uso de papel y de los suministros en general como bolígrafos, rotuladores, toallas de papel, vasos, bolsas de basura, productos de limpieza, etc., está claro que a día de hoy todavía es complicado eliminarlos en su totalidad. Por lo tanto, la mejor opción es buscar proveedores que nos garanticen un proceso de producción lo más respetuoso posible con el medioambiente.
8. Promueve el reciclaje, la reutilización y la reducción de residuos
El reciclaje es fundamental para mejorar la sostenibilidad de cualquier espacio de trabajo y, para mejorarlo, lo mejor es facilitarlo al máximo para todos los miembros de nuestro equipo poniendo una cantidad de contenedores adecuada y bien distribuida.
También es muy interesante estudiar en qué partes de nuestro proceso podemos reutilizar elementos como productos defectuosos, cajas, etc.
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9. Implica a tus empleados en los esfuerzos de sostenibilidad
Es necesario hacer sentir a los equipos que son una pieza fundamental de todos los esfuerzos de sostenibilidad de la compañía. Sin ellos, es imposible alcanzar los objetivos.
Para aumentar su adhesión a los planes, pídeles su opinión y ten en cuenta las sugerencias que aporten a los planes. Eso aumentará el apoyo general a los planes de la empresa. También puedes poner en práctica incentivos como ofrecer ventajas a los empleados que acudan al trabajo en bicicleta o fomentar iniciativas como que se traigan la comida hecha desde sus casas.
10. Obtén certificaciones de sostenibilidad
Obtener una certificación de sostenibilidad es una excelente manera de demostrar la utilidad de tus esfuerzos en favor por la sostenibilidad. Además, repasar todos los requerimientos que se necesitan para obtenerlas hará que completes los posibles huecos que hubieran quedado en tu plan de sostenibilidad.
No olvides que tendrás que renovarlo frecuentemente, lo que hará que mantengas tus prácticas de sostenibilidad actualizadas y que no caigan en el olvido.