No podemos hablar de reclutamiento y selección de personal en la actualidad sin mencionar algunos términos que ya resultan familiares, como es el caso de la “renuncia silenciosa”, el “despido silencioso”, el “abandono rápido” o el fenómeno que nos ocupa en el artículo de hoy: el quiet hiring o contratación silenciosa, una práctica que ya existía desde hace un tiempo atrás, pero que las circunstancias actuales han disparado en los últimos meses.
Ha sido tanto el auge que la famosa consultora tecnológica Gartner incluyó la contratación silenciosa entre las nueve tendencias laborales para este año e incluso se atrevió a calificarla como una ganar- ganar, pues bien aplicada puede estimular el descubrimiento de nuevos talentos y/o reducir la rotación de personal dentro de las empresas. Entonces, ¿qué es exactamente la contratación silenciosa y por qué se está expandiendo con tanta rapidez? ¿Qué ventajas ofrece para las empresas y para los trabajadores? Nos adentramos en este fenómeno y lo exploramos a continuación.
Tabla de contenidos
¿Qué es la contratación silenciosa?
La contratación silenciosa se basa en la idea de que una empresa puede ampliar la cantidad de habilidades dentro de su equipo e incluso llenar vacíos profesionales como objetivo principal ampliar la cantidad de habilidades dentro de un equipo y llenar vacíos profesionales con personal activo sin la necesidad de contratar personal extra.
Puede manifestarse de forma interna y externa dentro de una misma empresa, sin ser excluyentes una de la otra. La contratación silenciosa interna se da cuando la empresa mueve temporalmente a sus empleados hacia otros roles dentro del mismo equipo, mientras que la externa se da cuando la empresa contrata talento a corto plazo capacitado para cubrir las necesidades de la empresa, sin llegar a contratarlos a tiempo completo.
Ventajas y desventajas de la contratación silenciosa
Poniendo la lupa encima de este fenómeno, es evidente que hay mucha tela que cortar. Entre las ventajas generales podemos mencionar que la contratación silenciosa puede significar la posibilidad de nuevos retos para trabajadores que quieren explorar nuevos talentos e intereses, amén de la retribución económica que puede derivar de ello.
Estas primeras tareas asumidas fuera de su rol pueden significar un nuevo comienzo dentro de su carrera laboral, mientras que a nivel interno, la empresa evita reclutar a un trabajador nuevo y asumir su entrenamiento.
La cara opuesta es que, según las circunstancias y la ejecución de esta estrategia, más que un nuevo reto el trabajador puede sentirse sobrepasado al asumir tareas que no le competen y, sobre todo, que no le interesa. Esto puede jugarle en contra a la empresa, que en lugar de resolver la falta de talento, puede terminar con un empleado desanimado y agobiado por el peso de sus responsabilidades.
Los expertos advierten que para que la contratación silenciosa sea algo efectivo para el rendimiento del equipo y la productividad de la empresa, la comunicación asertiva entre ambas partes es clave: si no se les informa adecuadamente a los empleados el motivo detrás de los cambios de rol, podrían tomarlo como una señal de que ya no son útiles o valorados dentro del equipo, lo que incitará a que busquen otras oportunidades o a que su motivación diaria decaiga y afecte su rendimiento global.
Impacto en Recursos Humanos
No se trata de una práctica nueva dentro del mundo empresarial, pues al tener un trabajador con conocimientos en diferentes áreas además de aquella en la que se desempeña, es usual que se le encarguen nuevos proyectos o se le asignen tareas propias de otro puesto dentro del equipo.
Sin embargo, sí es importante tener en cuenta que este cambio significa asumir nuevas responsabilidades además de las detalladas en la descripción de su puesto de trabajo y, de no hacerse de manera correcta, puede generar frustración en el trabajador.
Desde el punto de Recursos Humanos, la contratación silenciosa puede traducirse en un mayor rendimiento del equipo sin que signifique un aumento de la nómina o incurrir en gastos extra.
También puede darse en situaciones en las que el equipo se ve sobrepasado por un proyecto particular y requiere de capital humano extra para poder sacarlo adelante, por lo que se recurre a la promoción interna en lugar de asumir un proceso de selección que implicaría entrenar a un nuevo integrante hasta capacitarlo para dar el rendimiento necesario.
Al tomar la decisión de recurrir a esta fórmula para compensar la necesidad de talento extra, el responsable de Recursos Humanos debe tener presente que, de no delimitar correctamente los tiempos y tareas extra que asumirán los trabajadores, o de no establecer una comunicación óptima en la que se tomen en cuenta los intereses de los mismos, la contratación silenciosa puede arrojar resultados desfavorables para el equipo, resultando en casos de desmotivación, agotamiento y burn out.
Gestionar la contratación silenciosa en las empresas
La fórmula más efectiva para gestionar una contratación silenciosa es que tanto las empresa (en este caso, el área de Recursos Humanos) como los trabajadores establezcan una comunicación bidireccional efectiva, de manera que ambas partes puedan dejar claras sus condiciones, sus objetivos y sus límites, para que dé los resultados esperados.
Es importante marcar las diferencias entre un proceso de contratación silenciosa y una simple sobrecarga de trabajo: la primera implica condiciones previamente pautadas e incentivos extra para compensar el esfuerzo del trabajador. la segunda implica cargar a alguien de tareas extra con la excusan de que hace parte de su trabajo, aún cuando no sea así.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que estas tareas añadidas no pueden ser a largo plazo, incluso si se están ofreciendo retribuciones monetarias por ello, pues la motivación que ofrecen las ganancias extra es temporal y la sobrecarga de trabajo termina pasando factura.
Esto no significa que no hayan profesionales que asuman las tareas extra o el desplazamiento de rol como un nuevo reto laboral, pero ninguna compensación salarial será suficiente si la carga de trabajo es excesiva o si las tareas impuestas no son del interés del trabajador y no despiertan su motivación.
👉Recuerda que puedes ahorrar tiempo en tareas diarias e invertirlo en lo importante: tu equipo. Solicita una demo de Factorial
